Aquí seré breve realmente, debido a su corta extensión. Los tres relatos cumplen con su cometido, el cual creo yo es fascinarte e incomodarte por la naturaleza de los personajes, los cuales al comportarse de esa manera que, al ser latino, ignoro en buena medida, pero que se logra notar: la manera oriental, y propiamente japonesa. Reitero, debo aprender mas de la cultura japonesa del medioevo y de la postguerra, ya que el autor unifica ambas épocas para darnos estos tres relatos.
No diré de que tratan, pero puedo decir que a pesar de suceder en circunstancias terroríficas y fantásticas, se pueden identificar comportamientos y sentimientos que en la practica de las acciones de los tres protagonistas, aunque me cuesta un poco, se vuelven evidentes y nos permite reflexionar sobre aquello que esta en todas las personas, pero nadie quiere pensar en ello y aceptarlo, como nuestro desasosiego por satisfacer nuestros deseos y nuestra inconciencia a nuestra propia moral y de nuestros principios para calmar esos deseos, etc.
Además, el epilogo es profundamente interesante e insufla un poco mas en mi el deseo de conocer mas sobre la historia oriental, mas que todo de China y Japón. Por todo ello, por la obra y la importancia de su autor puesta en evidencia por el autor de dicho epilogo, es que la obra me parece un 7.6/10⭐
Hay tanto por leer!